La amalgama de oscuridad y grandiosidad en "Råtijinn" da forma a una experiencia auditiva que trasciende los límites convencionales del black metal. Este álbum no solo abraza la agresión sombría, sino que también se sumerge profundamente en el abismo del black metal pagano. Inspirándose en las raíces de la escena escandinava clásica, logra expandirse hacia nuevos horizontes con influencias folklóricas, creando composiciones que se ubican en un territorio sonoro entre las huellas de Darkthrone y Kampfar. Además, se intuye la influencia del crust punk, que añade un elemento distintivo y efectivo a la mezcla.
La música que se despliega en este álbum tiene la asombrosa capacidad de tejer una atmósfera envolvente con facilidad, transportando al oyente a un mundo de vientos helados y paisajes nevados. La experiencia es como caminar con dificultad a través de la desolación invernal, mientras las brillantes luces celestiales arrojan una luz misteriosa y perturbadora sobre la escena. Ocasionalmente, los sintetizadores se suman con moderación, potenciando aún más la inmersión en esta experiencia, como si se estuviera en medio de un rito ancestral en la noche.
Las composiciones en "Råtijinn" están magistralmente elaboradas, y aunque cada elemento de la música es ejecutado con precisión, destacan especialmente las guitarras rítmicas y los riffs melódicos. El artista detrás de Hilning revela un conocimiento profundo y apasionado del género, y cada pista golpea como una ola de oscuridad y poder ennegrecido. Este álbum no es simplemente una obra musical, sino un portal hacia un reino de sombras y desesperación, una invitación a explorar la profundidad de la oscuridad y la belleza que se esconde en ella. "Råtijinn" es un viaje oscuro y misterioso que hipnotiza y atrapa al oyente en su abrazo gélido, y es una obra maestra en el arte del black metal que merece ser explorada a fondo por aquellos que buscan la profundidad de la oscuridad en la música.