Nihilvm revela su primer álbum de larga duración, Ancient Cosmic Emanation, editado bajo los sellos Terratur Possessions y Malignant Voices, dos entidades fundamentales en la custodia de las obras más insondables del arte extremo contemporáneo.
A lo largo de ocho composiciones, el álbum desciende hacia visiones de un cosmos muerto, un firmamento corroído por la ausencia, el silencio y la desintegración espiritual. Cada pieza actúa como un acceso a territorios donde la conciencia se fragmenta y la realidad pierde su forma, guiando al oyente a un estado liminal entre la vigilia y la extinción del ser.
Ancient Cosmic Emanation es más que un disco: es un tránsito hacia el límite mismo de la cordura, una exploración de las profundidades interiores donde ya no queda nada salvo la resonancia del vacío eterno. La obra se erige como un ritual hipnótico, una invocación de fuerzas primordiales que convergen en la implacable Muerte Cósmica Negra, cuya presencia impregna cada pulso, cada respiración, cada sombra resonante dentro del álbum.
Un testimonio sonoro de oscuridad absoluta, revelado para aquellos dispuestos a cruzar el umbral.
Deconstructing Sequence emergió en 2012 en Taunton, Somerset (Reino Unido), concebida por Tiberius como un experimento sonoro destinado a trascender los límites del metal extremo. Junto a Morph, antiguo camarada en Northwail, el dúo emprendió una búsqueda hacia territorios más progresivos, disonantes y visionarios. Poco después, J. Nerexo (de Shadows Land) se unió como baterista, infundiendo una energía retorcida y violenta que consolidó la primera encarnación de la banda. De esta unión nacieron dos EPs y un álbum que marcaron el inicio de una travesía cósmica hacia lo desconocido.
El debut, Year One (2013), mezclado y masterizado por Arkadiusz “Aro” Jabłoński en Monroe Sound Studio, representó una declaración de independencia creativa: un portal abierto hacia una nueva era de exploración sonora. Su sucesor, Access Code (2014), acompañado por un video conceptual del visionario Costin Chioreanu (Twilight13Media), amplió el espectro visual y conceptual del proyecto. En 2018, Cosmic Progression: An Agonizing Journey Through the Oddities of Space —publicado por Via Nocturna— consagró a Deconstructing Sequence como una entidad única dentro del firmamento del metal extremo, aclamada por su audacia y su ruptura deliberada con toda convención.
Tras la reubicación de Tiberius en Szczecin, Polonia, el proyecto mutó una vez más. Con la partida de Morph, el baterista Dark Soul ingresó en 2018, insuflando una energía densa y ritualista. Entre 2022 y 2025, bajo la guía del productor Arkadiusz “Aro” Jabłoński, se materializó Tenebris Cosmicis Tempora: un trabajo grabado en Monroe Sound Studio, con las voces adicionales de Mazak y Adrian. En 2023, Immortal se unió como bajista permanente, seguido de Uruk como segundo guitarrista a finales de 2024, consolidando una formación férrea, lista para invocar su visión sobre los escenarios.
La banda desveló el pasado 07 de noviembre de 2025 su segundo álbum de larga duración Tenebris Cosmicis Tempora. Una espiral de oscuridad consciente, una amalgama entre la furia primitiva de Mayhem, la grandeza abismal de DHG y Emperor, y la profundidad onírica de Akhlys. Si el trabajo anterior exploraba la intersección entre death y post-metal, aquí la banda se disuelve y renace en una nueva forma: un organismo de black metal desquiciado, alienígena y totalmente liberado de la estructura humana.
El álbum narra una alegoría sobre la autodestrucción y la vanidad cósmica del hombre. Relata la travesía del último ser humano tras el ocaso de la Tierra, su ascenso hacia una divinidad corrupta, y su caída definitiva ante las fuerzas que creía dominar. Guiado por Lucifer y luego devorado por entidades sin nombre, presencia el colapso de la fe, del poder y del propósito. En su afán de recrear el universo, se convierte en el eco de la misma fuerza aniquiladora que lo engendró. Al final, solo el vacío permanece: un reflejo eterno de la imperfección humana, resonando en la nada.
Editado por Black Lion Records, el disco ya se encuentra disponible en CD y en todas las plataformas digitales y de streaming.
El concepto de “Głód” (“Hambruna”) se inspira en antiguas prácticas rituales de Polonia, particularmente en la región de Warmia. Estas tradiciones, transmitidas oralmente de generación en generación, han perdurado en el folclore local hasta nuestros días y también se registran en antiguos archivos de juicios relacionados con la magia negra.
En aquellos tiempos, al finalizar el invierno, los aldeanos realizaban sacrificios para invocar el despertar del sol y propiciar el renacimiento de la naturaleza. Sin embargo, según la leyenda, hubo un año en el que una mujer —consumida por la venganza y el odio— alteró el curso del rito. En lugar de ofrendar vida, invocó la desolación: lanzó un hechizo de hambre sobre la tierra de todos los campos, maldijo las siembras con cosechas muertas y extendió un sortilegio de sed sobre los ríos.
De la tierra yerma bebió la sequía; de su boca, colmada de aguas muertas, la lluvia regresó al cielo. Y así, la hambruna fue sembrada…