El álbum de Bathyum lanzado en 2018 se alza como una invocación de pura oscuridad, una obra que rechaza toda forma de luz y esperanza para hundir al oyente en un abismo espiritual. La producción, deliberadamente primitiva y sepulcral, envuelve cada pista en una atmósfera de muerte, como si cada sonido emanara desde antiguas criptas olvidadas. No hay concesiones, no hay modernidad: solo devoción absoluta al espíritu más frío, nihilista y blasfemo del black metal tradicional.
Las composiciones se desarrollan como rituales de autoaniquilación, arrastrando al oyente a través de frenéticos ataques de furia y pausas sombrías que evocan el eco de lo arcano. Las letras no se limitan a describir oscuridad: la encarnan. Suicidio, sangre derramada, entidades antiguas sedientas de culto y el retorno a los caminos paganos son presentados no como ficción, sino como verdad espiritual.
Este álbum no está hecho para el consumo casual: es una experiencia devocional destinada a quienes entienden el black metal como un acto de negación absoluta del mundo moderno. A pesar de haber sido concebida en 2018, esta obra podría pertenecer a cualquier época oscura de la historia, porque su esencia trasciende el tiempo. Bathyum no crea música: levanta un altar a la misantropía y al eterno reinado de la sombra.
Scars Of Divine Rebellion se levanta como una maldición sonora forjada en el núcleo ardiente del caos primigenio, un testamento blasfemo que reaviva el espíritu más abismal del Doom Black Metal noventero. Este álbum no rinde homenaje: profana, demuele y sepulta. Cada riff surge como una daga ritual atravesando el velo entre los vivos y los muertos, invocando la pestilencia sagrada del Dark Metal y la decadencia espectral del Gótico como armas de trascendencia espiritual.
Lo que aquí se manifiesta no es música, sino un acto sacrificial. Las sombras de Rotting Christ, Samael y Varathron se arrastran como serpientes litúrgicas entre los escombros de un templo en ruinas, mientras la voz del abismo convierte la herejía en doctrina. Cada composición es un decreto de guerra contra la luz, una invocación del luciferismo en su forma más cruda y gnóstica, no como blasfemia vacía, sino como trascendencia violenta y reveladora.
Scars Of Divine Rebellion es la apertura del portal final, un descenso irreversible donde el alma se enfrenta a su desgarro divino. Este álbum no promete redención: promete la disolución total en el fuego negro de la gnosis prohibida.
El despertar del abismo comenzará el 02 de Enero de 2026.